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Migrante venezolana: Sinónimo de lucha, empatía y resiliencia

49 % de la población migrante proveniente de Venezuela son mujeres, según cifras de Migración Colombia

por Erika Rojas
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Según Migración Colombia, entre 2020-2021 el 49 % de la población migrante que residía en este país estaba conformado por mujeres

En Colombia se espera la regularización de casi 2 millones de venezolanos y de ese número la presencia de la mujer venezolana podría ocupar más del 50%. Esto sería posible porque entre 2020-2021 ya alcanzaba 49% de la población total.

Las cifras de venezolanas que huyen del país se acelera por la precariedad, la crisis política y económica, social, sanitaria, jurídica y de seguridad que viven a diario los ciudadanos en Venezuela. Escapan profesionales, estudiantes, esposas, madres, adolescentes, niñas, y cabezas de hogar.

¿Por qué se van las venezolanas de su tierra? Se van de su patria porque no le garantizan su derecho a la vida, libertad de expresión, educación, salud, libre circulación, trabajar y vivir dignamente, entre otros factores.

Esos escenarios de crisis que se viven en el país suramericano ha ocasionado la salida de mujeres en edad productiva y menores que deberían estar disfrutando de ser niñas y no adultas con responsabilidades que no les corresponden.

Ante la necesidad de rehacer sus vidas en nuevas tierras, que es una labor que requiere un esfuerzo superior a la media de los residentes, muchas han asumido trabajos con una carga horaria que superan las 10 horas o con pagos ínfimos que solo les permite cubrir sus necesidades más básicas.

Miles han dejado a un lado su experiencia en su área profesional y han asumido empleos en el comercio y en otros sectores de la economía en los que han encontrado una oportunidad para sustentarse.

Todas han sido valientes, guerreras, mujeres que están luchando por conseguir su sueño de tener una vida mejor y labrarse con esfuerzo sostenido y constancia las oportunidades y formar parte del sector productivo de su nueva tierra.

Rostros del éxito femenino en Colombia

En este Día Internacional de la Mujer, recordamos a todas las mujeres que lucharon un 8 de marzo del año 1.908 para tener los mismos derechos que sus compañeros varones en paga igualitaria y una jornada laboral adecuada.

En la actualidad, las mujeres siguen luchando casi exactamente por lo mismo. Por ejemplo, en el caso laboral, aunque no sucede con todas, las migrantes en diversos países, Colombia incluido, deben trabajar hasta más de 12 horas.

Por eso muchas mujeres extranjeras deciden emprender, aprender nuevos oficios y ser resilientes.

“Al principio fue muy doloroso”

Nadiuska Méndez es caraqueña, salió de Venezuela hace 4 años y se residenció en la ciudad de Medellín. Es esteticista integral y trabaja a diario para embellecer a las venezolanas y colombianas.

“Al principio fue muy doloroso, me costó mucho adaptarme. Trabajé durante dos años en un lugar donde no me sentía bien, porque no conocía la ciudad”, relata.

Sin embargo, “gracias a Dios y a personas maravillosas, salí de ahí… logré conocer lugares mejores”, señala.

Hoy en el Día Internacional de la Mujer, ella le dice a las venezolanas que “luchen por sus sueños… Todas podemos salir adelante”.

“Mi experiencia sigue siendo evolutiva”

Nieves Rodil, oriunda de Caracas, emigró junto a su familia en 2014. Para ella su experiencia migratoria ha sido “educativa y evolutiva”.

“Siempre hago las cosas con el corazón demostrando mi tenacidad y siguiendo para adelante sin perder el rumbo”, señala.

Junto a Nieves vive Daniela Manrique, su hija de 34 años, profesional de la belleza y emprendedora con un local estético llamado Daniela Manrique Nails, que está ubicado en Bogotá.

“Todos los días me levantó temprano para vender café”

Belkis Dugarte es una caraqueña que llegó a la ciudad de Funza, región de Cundinamarca, en septiembre de 2018. Ella se caracteriza por ser luchadora, perseverante y agradecida con la vida. “Soy bendecida y me levanto temprano para vender café», dice siempre Belkis ante los obstáculos.

Aunque en Venezuela se desempeñaba en otra área, Dugarte ahora trabaja en el Parque Principal de esa ciudad vendiendo los mejores tintos (cafés) de la zona y no se amilana ante las dificultades. Sabe que en algún momento podrá tener una oportunidad para mejorar sus condiciones laborales y de vida.

“Las mujeres en Colombia son la mejor demostración de que sí se puede”

Yasmin Velasco es una periodista venezolana que vive en Bogotá junto a su familia desde hace cinco años. Trabaja como reportera-presentadora en el famoso programa colombiano Testigo Directo y como periodista corresponsal de El Venezolano, en Miami.

Para Velasco “las mujeres venezolanas en Colombia son la mejor demostración de que sí se puede, siempre se puede… han salido desafiando toda clase de obstáculos, incluida la discriminación y la xenofobia, todo para construir un nuevo hogar lejos de su tierra”.

“No ha sido ni será fácil la tarea, pero se puede con trabajo y demostrando con compromiso, pasión y lealtad que podemos sembrar lo mejor de cada una de nosotros en este país», sostiene la comunicadora.

Recuerda que lo importante es que las venezolanas «jamás se rindan».

Mujeres que valen oro

De las pantallas venezolanas también han migrado artistas, comunicadores sociales y profesionales de otras áreas que han conseguido un nuevo hogar en el país vecino.

Entre esas mujeres destacan las periodistas venezolanas Idania Chirinos, Andrea Restrepo, Karla Salcedo Flores, así como las actrices Coraima Torres, Marianela González y Rosmeri Marval, entre otras.

ER/CBP

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