¿Eres migrante venezolana, vives en Medellín y tienes un emprendimiento, pero no puedes pagar a un profesional para que te ayude a hacer un plan de comunicación de tu negocio en las redes sociales? ¡Esta oportunidad es para ti!
El próximo viernes se realizará un seminario exprés de Community Manager para que aprendas tácticas que te permitirán sacarle el máximo jugo a las redes sociales en pro de tu emprendimiento.
La coach Marisela Oviedo y el community manager Job Licera serán quienes te enseñarán a darle visibilidad a tu emprendimiento y estrategias básicas para optimizar tu presencia en el mundo digital.
Esta actividad, sin costo alguno para los asistentes, la organizan las fundaciones Comucolven, Corpvolven, Famicolven y Marquemos la diferencia, las cuales se unen para apoyar y acompañar a las mujeres venezolanas residenciadas en Medellín
Las interesadas en participar, deberán apurarse y escanear el código que encontrarán en la publicación de Comucolven o comunicarse con ellos a través de las redes sociales y pedirles que le envíen el formulario
La capacitación será el viernes 25 de marzo, desde las 9 de ka mañana hasta 12 del mediodía, en la Carrera 49 #60 – 57 de Medellín.
Venezolanas con espíritu emprendedor
Gran parte de las venezolanas siempre han sido mujeres emprendedoras, que aunque tenían su trabajo formal en una empresa, buscaban desarrollar en sus tiempos libres alguna iniciativa comercial que les permitiera obtener más recursos para mejorar su calidad de vida y la de su familia y, al mismo tiempo, crecer como ser humano al asumir el reto de liderar un proyecto, por más pequeño que pueda ser.
Y aunque para las mujeres venezolanas la situación cambió con la crisis humanitaria compleja que atraviesa su país y que les ha llevado a migrar a otras tierras en busca de oportunidades que les permita salir adelante y sustentar a sus familias, no han perdido ese espíritu emprendedor y mantienen sus sueños de montar su propio negocio y convertirse en factor de desarrollo en el nuevo país que les ha recibido.
Pero las mujeres venezolanas no sólo emprenden por oportunidad y desiderátum, sino también por necesidad, porque, como migrantes y mujeres, enfrentan una serie de barreras que pueden hacer que les cueste más que a los hombres reinsertarse en el mercado laboral.
Además, miles están en situación irregular aún, lo cual les limita el acceso a trabajos formales, y ante esa realidad, buscan desarrollar actividades productivas por cuenta propia.
Según una investigación realizada por la organización Cuso International, “tres de cada 10 mujeres venezolanas activas en el país están desempleadas”.
Y las que no están desempleadas, pero que se encuentran de manera legal en el país y son profesionales, también sufren la exclusión como consecuencia de xenofobia, sueldos inferiores a los que gana un colombiano o simplemente les exigen tantos requisitos para las vacantes que se hace inaccesible para ellas acceder a las ofertas de trabajo en las áreas para las que se encuentran cualificadas.
